No sé cómo pasó pero la escena está fresca en mi mente: Mi hermana y yo llevábamos cerca de diez minutos diciéndonos de cosas, peleando. En algún momento su rostro se puso todo rojo y con toda la fuerza de su garganta a los once años me gritó: PUES DEJA DE ROBARTE A MIS AMIGOS.
Ya pasaron once años desde entonces y es algo que no he podido olvidar. Mientras crecimos nadie volvió a sacar el tema pero los comentarios no dejaron de salir. De vez en cuando hacía alguna broma respecto a eso, a que me robo amigos. En ese momento no me importó porque dentro de mi mente no era verdad. ¿Robarme amigos? ¿A los suyos? Pfff, yo tenía a los míos. ¿Para qué quiero amigos ajenos?
Lo dejé pasar, porque había sido algo que salió en el calor del momento. Ni siquiera recuerdo porqué me acusó de eso y por consecuencia, no significó gran cosa para mí.
Dos años después me acusaron de lo mismo, de haberme robado la amiga de alguien más, cuando estaba en la secundaria.
Llegué a una escuela nueva y no conocía a nadie. Por pura gracia del destino y todo eso, conocí a una chica cuya pasión por los Jonas Brothers nos unió -y hasta la fecha seguimos unidas :3-; ella tenía más amigos pero empezó a juntarse mucho conmigo, al punto de abandonarlos para irse a sentar conmigo en el recreo para almorzar. Y se dio, ya saben cómo pasan estas cosas.
Pero como la secundaria es un pozo lleno de pólvora listo para encenderse y explotar, fui señalada como la "roba amigos". Porque me había robado la amiga de alguien más. Porque había conseguido que ella me prefiriera a mí.
Entonces me reía y seguía el juego. No me importaba porque pensaba: OMG YO NO HAGO NADA. Era cierto. Yo no le pedía a esta chica que dejara a sus amigos por mí ni nada, nunca quise alejarla de su "grupito". Las cosas pasaron y con el tiempo, viendo mis compañeros que ella y yo nos llevábamos MUY bien, decidieron dejarlo por la paz.
No me importaba, o quería pensar que así era.
Y quizás hubiera sido así de no ser porque volvió a repetirse, años después.
Mi reputación me precedió de alguna manera: aún la gente sin conocerse, tenían conceptos similares sobre mí.
La roba amigos se quedó como para describirme. No era tan grave como ser llamada puta o zorra o la copia-exámenes, pero se quedó ahí, latente.
¿Afectó en algo mis relaciones? Quiero pensar que no, pero creo que sí. La gente me miraba raro y siempre asumí que era porque creían que soy rara. Pues lo soy, pero también lo que se decía de mí importaba.
Tiempo después, una de mis mejores amigas que estudiaba en Guanajuato me invitó a pasar con ella una noche de fin de semana. Fui con mi falda más corta (7u7) y con la firme intención de perderme entre vodka y mezcal y así fue. Cuando llegamos al primer bar, me dijo que veríamos a su mejor amigo y al novio de éste y yo le dije que PUES YA QUÉ, pensé que nada más estaría con ella pero ni mo2.
Conocí a su mejor amigo, un increíble y talentoso poeta y al novio de entonces, un estudiante de medicina, y cuando mi amiga le dijo a su amigo que yo también escribía, él y yo nos enfrascamos en una bastante cómoda plática del gremio literario y procesos creativos, ya saben. No tengo mucha relación con otros escritores porque los que he conocido están dementes pero él parecía alguien bien decente y talentoso y en general alguien de quién podría aprender, así que me aventé de cabeza a esa conversación. En algún punto este agradable chico se soltó a carcajadas con algo que le dije y me abrazó la cabeza y dijo:
"Ay, me encanta Mariana, qué deliciosa manera de expresarse tiene"
Fue bonito hasta que mi amiga rompió el abrazo diciendo que ya era suficiente.
Suficiente.
Suficiente. ¿Suficiente? Suficiente.
¿Suficiente de kHA?
El resto de la noche estuvo medio raro. Ella no volvió a mencionar nada y yo tampoco. Tuve la sensación de que ella se había incomodado por eso y no quería hacerla enojar más así que me mantuve a la distancia.
Dos semanas después vi que este chico me había encontrado por Instagram y Facebook y me había mandado solicitud.
Ñññññññ
Me han pasado cosas así con el paso del tiempo y por mucho que yo quiera hacerme la tonta, de pronto siento que ese "Deja de robarte a mis amigos" aparece en el fondo de mi mente.
Pienso mucho en, por ejemplo, cómo mi ex también me acusó de haberme "robado" la atención de un chico que era en un principio amigo suyo de Twitter con quién yo terminé congeniando bastante bien porque nos gustan muchas series en común.
Pienso mucho en, por ejemplo, cómo el mimors me acusó de haberme "robado" a su amiga Monse, meses atrás.
Pienso mucho en, por ejemplo, cómo Dianita <3 me confesó esa noche en el airnb, mientras tomábamos fourloko, que me había seguido por Twitter nomás por querer saber quién era yo y por qué me hablaba tanto su amigo Carlos (Carlos querido pa' mí <3)
Pienso mucho en eso y neta a veces siento cómo se me nubla la vista y me mareo.Conocí a todas estas personas en situaciones fortuitas, accidentales, incidentales, ajenas a mi control.
Me gusta tener amigos, no voy a mentir, pero tampoco es como que vaya eligiendo a personas específicas para que sean mis amigos. En realidad, yo ni siquiera elijo a mis amigos JAJAJAJA ellos me eligen a mí.
Qué más quisiera yo que tener buenos y leales amigos con quiénes compartir mis cosas y mi vida y yo misma pero pues no se puede.
Me parece un pocMUY problemático pensar que una va con un plan bajo la manga para "robarse" amistades y relaciones valiosas. Como si yo o alguien más ganara algo con ello. O sea, ño.
Me angustiaba bastante pensar así, que quizás sí lo hacía a propósito. O peor: que estaba dañando a las personas a mi alrededor sin darme cuenta. Y una ya de por sí es introvertida, ahora imagínense tener la ansiedad de estar pensando que si me llevaba muy bien con alguien quizás significaba que iba a romper su relación con un grupo específico de personas y omg no podía vivir con eso.
Con el tiempo vi las cosas de otra manera: Si algo aprendí de mi ex es que nadie nos pertenece. Las personas no somos de nadie más y también como decía Karli: no podemos "robarnos" a las amistades, porque son elecciones libres.
Estas personas elegían conocerme a mí y convivir conmigo. Yo no podía -ni puedo- convencer a alguien de lo contrario, no importa cuántas artimañas pueda ejecutar. No podría mover a alguien que no quiere ser movido.
Tampoco tengo culpa de la inseguridad que alguien puede sentir porque su amigo hace otro amigo, like KHEEEEE. De veras no sean así.
A mí me gusta que mis amigues tengan más amigues porque así cuando me muera no me iré preocupada de que se queden solites.
Pero sí, es medio caótico. Y confuso, porque ni siquiera me considero alguien particularmente agradable y en realidad creo que no soy tan ~buena~ amiga como muchos podrían pensar.
No voy a mentir, a veces todavía pienso en eso, en ser "la roba amigos" pero lo supero rápido porque miren, a mí me gusta ser amable, y si alguien se siente bien Agustín de Iturbide conmigo, quién soy yo para decirle que me odie???
A poco no??
Como sea.
¿Quieren ser mis amigues?
